Tarde soleada en Ciudad Universitaria, calor, una leve brisa y como no podían ser de otra manera unas bien heladas para calmar la sed. Sólo una breve descripción del comienzo de una larga entrevista con Rey Garufa. Nos pudieron contar todo sobre el lanzamiento de su primer disco, “Cielos que no limitan sueños”, la gran presentación en La Sala del Rey, entre otros detalles que respectan a esta proyección a nivel del rock under local. La banda tiene 4 años y ellos mismos aseguran estar en un punto al que quizás no pensaban llegar. Una Sala del Rey llena los dejó con la boca abierta, pero eso no los paraliza y van por más.
Tierra de estudiantes, tierra de libros y apuntes, pero más allá de eso, tierra mucha tierra mezclada con calor de primavera y ese sol tibio pero que a la vez quema. Allá, entre medio de facultades y escuelas me encontré con Javier Zárate, Juan Pablo y Pablo. Salían de otra entrevista, pero en ese caso audiovisual quejándose de la base de maquillaje mientras, al mismo tiempo, se refregaban la cara entre risas y Javier confesaba no haber nacido para eso. Vuelvo a repetir, hacía calor así que colamos en un kiosco y nos acomodamos en una mesa redonda con una integrante más, una cerveza bien fría.
“Este momento es el más alto a nivel laboral y amistad, ya que nosotros somos una banda de amigos principalmente que se juntan y hacen música” contó Pablo, mientras Javier agregaba: “Realmente si no fuera por la ayuda de todos no podríamos hacer nada. Para mí el circo ese de que la banda somos sólo los que tocamos, no existe. Circunstancialmente hacemos música y estamos en un escenario seis, pero hay un grupo de gente que está dentro de la banda que es parte fundamental también”. Así definían a Rey Garufa casi al unísono una y otra vez: un grupo de amigos, cualidad casi esencial que les posibilitó caminar a amplios pasos y con fortaleza.
Esa característica, que como ellos subrayan está en su estado máximo en este momento a comparación de cuando empezaron, les posibilitó con la ayuda de otros condimentos sellar su primer material discográfico y llenar de cuerpos La Sala del Rey. “Fue un desafío bastante grande hacer algo ahí, porque nosotros de hecho si perdíamos plata iba a estar todo bien igual, no íbamos a ganar, íbamos a presentar el disco en un lugar que sea digno para lo que considerábamos acorde con lo que habíamos hecho”, dijo Javier y Pablo fue muy gráfico cuando sumó a lo anterior: “Creo que ninguno de nosotros todavía cayó realmente de lo que hicimos”.
Cielos que no limitan sueños es una producción totalmente independiente y demuestra la suma de fuerzas conjuntas de todo un año de trabajo. Fue grabado en Córdoba, en Desdémona, dirigido por los Bergallo. En cuanto a la etapa posterior, de mastering, fue realizada en Buenos Aires, a lo que Javier explicó: “Estudios de mastering acá en Córdoba no hay, si bien se hacen, no son mastering a nivel de disco “pro”. Entonces ahí tuvimos que ir a Buenos Aires porque queríamos cerrarlo completamente bien y lo hicimos en el estudio de un loco que grabò a Soda Estéreo en las dos giras que es un estudio de la re puta madre”. Mientras seguía refregándose la pintura de la cara Javi seguía respondiendo acerca del resultado final del material: “Hay cosas que objetivamente se podrían cambiar pero también son parte del crecimiento. Yo creo, que todo lo que podíamos dar lo dimos en todo el laburo que implica el disco”.
Por otro lado, hablaron sobre sus próximas presentaciones por lo que adelantaron un gran cierre del año con bandas amigas en diciembre y entre otras cosas, una fecha en Buenos Aires, en el Super Rock de Capital Federal. Sobre esto último Javier aclaró que hay varias invitaciones para distintos lugares fuera de nuestra provincia, pero la acotación final fue clara: “Antes de todo eso queremos terminar de cerrar nuestra movida acá en Córdoba”.
Mientras la cerveza se acababa y aparecían otras, alrededor estaba lleno de movimiento y la cinta del cassette no paraba de girar, la charla seguía y entre palabras que iban y venían apareció en la conversación la talentosa Lula Bertoldi de Eruca Sativa. Rey Garufa la invitó a hacer De sangre y miel en el disco y Javier contó el por qué de su aparición: “A ella la conozco de hace muchos años de María María, cuando yo tocaba en La Gangosa. Y hace mucho, antes de que existiera Eruca, en una fecha nuestra de un segundo aniversario, yo la invite a hacer esa canción porque es un tema muy cálido y la voz de ella siempre me llegó muchísimo”. Describió que a ella le encantó la movida de la banda porque decía desconocerla. “Ella tocaba en otro circuito de música y bandas, por lo que no sabía del público, por decirlo de alguna manera, más futbolero” agregó Javier.
Después de este gran salto y crecimiento la banda planteó un objetivo a futuro, siendo este “presentar el disco en la mayor cantidad de lugares y por sobretodo laburar acá en Rosario y en Buenos Aires que son como los epicentros mas grandes donde se puede difundir una banda”, dijo Javier. Además agregaron que siempre se plantean metas que superen las anteriores para consecuentemente conseguir crecimientos cimentados que puedan apreciarse y valorar.
Rey Garufa es una banda bien cordobesa que se pone la camiseta y con orgullo apunta a levantar vuelo en compañía de otros grupos, el rock de nuestra provincia que tan dejado de lado está por momentos. Ellos mismo aseveran que esta es una etapa en la que muchas bandas están logrando concretar proyectos que venían de hace años y lo más importante es que entre las bandas se apoyan para seguir creciendo.